Mercado del trigo: agricultores cuestionan análisis de precios por omitir la calidad panadera
Desde Agricultores Unidos A.G. advierten que el debate sobre los bajos precios del trigo en Chile carece de rigor técnico e ingenieril, al centrarse en el volumen producido y omitir la calidad del grano, pese a que los costos de importación se mantienen relativamente estables.
El artículo publicado recientemente en la Revista del Campo de El Mercurio, que aborda una producción “estable” de trigo y precios bajos, reabrió la discusión sobre la formación de precios del cereal en el mercado nacional. Sin embargo, desde el gremio Agricultores Unidos A.G. sostienen que el análisis presentado es incompleto, al no distinguir entre calidades panaderas ni considerar adecuadamente el desarrollo productivo y genético del trigo chileno.
“No es técnicamente correcto comparar trigo argentino, cuya calidad panadera hoy es bastante discutible, con trigo nacional cuyas calidades están completamente establecidas y aseguradas”, señaló el director del gremio, Nicolas Larenas. “En Chile existe un trabajo serio de mejoramiento genético y de control de calidad, desarrollado por las propias empresas y programas de semillas, que permite entregar trigos con muy buenos parámetros panaderos para la industria nacional”.
Volumen no es sinónimo de oferta real
Uno de los puntos críticos del debate es la referencia a la alta producción argentina como factor determinante para explicar precios a la baja. Desde Agricultores Unidos A.G. advierten que esta afirmación no distingue entre volumen físico y oferta efectiva de trigo panadero.
“Precio es oferta y demanda, pero oferta de qué y para qué”, explicó Larenas. “Si aumenta el volumen, pero no aumenta el trigo que sirve para hacer pan, entonces no existe una abundancia real en el mercado que consume la molinería”.
Argentina es un actor relevante del mercado regional y global del trigo. Sin embargo, cuando su producción presenta heterogeneidad o deficiencias en parámetros como proteína, fuerza de gluten o estabilidad, la disponibilidad de trigo apto para panificación se reduce, aun cuando las cifras totales de cosecha sean elevadas.
“Cuando Argentina tiene problemas de calidad, no es un problema local; se siente en todo el mercado regional”, agregó el dirigente gremial.
El rol del trigo chileno
En este escenario, Agricultores Unidos A.G. subraya que el trigo chileno compite en un segmento distinto, caracterizado por estándares panaderos estables y trazables.
“El trigo chileno es panadero, no forrajero. No se destina a alimentación animal y cumple con parámetros técnicos que la propia industria exige y valida”, afirmó Larenas. “Eso es resultado de años de desarrollo genético, manejo agronómico y exigencias comerciales que hoy están consolidadas”.
Desde el gremio advierten que, cuando escasea trigo de calidad en los mercados internacionales, la demanda se desplaza hacia orígenes capaces de cumplir esos estándares, entre ellos Chile. Ignorar este fenómeno distorsiona la lectura del mercado y la formación de precios internos.
Costos de importación: señales claras, pero mal interpretadas
Los datos oficiales de COTRISA, elaborados con información de ODEPA, muestran que el costo alternativo de importación de trigo puesto en Santiago presenta solo variaciones acotadas entre diciembre de 2024 y diciembre de 2025, especialmente en los trigos de referencia provenientes de Estados Unidos.
“Cuando uno analiza los números con criterio técnico, no se observa un colapso del mercado internacional que explique precios tan deprimidos para el productor chileno”, sostuvo Larenas. “Las señales externas son relativamente estables, pero esa información se está interpretando de forma simplificada”.
El problema interno: calidad exigida, pero no pagada
Para Agricultores Unidos A.G., el principal problema se encuentra en el funcionamiento del mercado interno. Según explican, la molinería chilena exige estándares de calidad cada vez más altos, pero no los remunera adecuadamente.
“Hoy en Chile se exige calidad, pero no se paga”, afirmó Larenas. “Al productor se le piden parámetros claros, pero al momento de comprar se le paga como si entregara trigo indiferenciado. Esa es la principal distorsión del sistema”.
“Chile está primero”
Desde Agricultores Unidos A.G. concluyen que el debate sobre el trigo debe elevar su nivel técnico y reflejar de mejor forma la realidad productiva del país.
“Chile está primero”, enfatizó Larenas. “El grano nacional tiene calidad comprobada, tiene demanda real y cumple un rol estratégico. Invisibilizar eso no es solo un error técnico, es un riesgo para el futuro del sector”.
https://bccba.org.ar/informes/informe-economico-n-461-trigo-2025-26-una-campana-record/
