El escritor Aldous Huxley, escribió en el año 1932 su divulgada obra “Un Mundo Feliz”, novela distópica que presenta una visión pesimista del futuro del mundo. Muestra una sociedad regida por el condicionamiento psicológico como parte de un sistema inmutable de castas, las que ejercían diversas formas de control sobre la vida de los individuos. Huxley se anticipó con mucho a una sociedad futura que al parecer empezamos a ver ya entrado en el siglo XXI.
El desarrollo de nuevas tecnologías, como resultante de las tecnologías de la información, presenta un desarrollo exponencial y en apariencia ilimitado, sus aplicaciones, podrían conducirnos al mundo pesimista que visualizó Huxley o el que visualizó el escritor de ciencia ficción Philip K. Dyke, autor de la novela “¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?”, que se convirtió en el guión cinematográfico de la película Blade Runner. Ya en 1968 consideraba la existencia de androides controlados por inteligencia artificial.
La Inteligencia Artificial (IA) está entre las nuevas tecnologías, con un creciente y exponencial desarrollo. Para comprender de que hablamos, brevemente responderemos a un par de preguntas ¿Qué es la Inteligencia Artificial y a que nos referimos cuando hablamos de ella?, ¿Por qué es tan importante en la actualidad?
Cuando hablamos de Inteligencia Artificial, nos referimos a sistemas capaces de analizar datos en grandes cantidades (Big Data), identificar patrones y tendencias las que permiten formular predicciones de manera automátizada, con mucha rapidez y precisión. En la vida cotidiana actual, podemos identificar algunos ejemplos ampliamente conocidos como Facebook, Google Fotos, Instagram que sugieren el etiquetado y agrupamiento de fotografías, basado en el reconocimiento de imagen, o aplicaciones (apps) como Waze, que brinda información anticipada de tráfico y navegación en tiempo real o Uber que permite el uso de un sistema de transporte eficiente, controlado y mayormente seguro solo utilizando un teléfono móvil. Existen muchas otras formas de Inteligencia Artificial, con las que convivimos cotidianamente
La IA hace posible que las máquinas aprendan de la experiencia, se ajusten a nuevos aportes y realicen muchas tareas imitando lo que hacemos los seres humanos. La mayoría de los ejemplos de IA de los que escuchamos hoy – desde computadoras que juegan ajedrez hasta automóviles que se conducen por sí solos – se sustentan mayormente en aprendizaje a fondo (deep learning) y procesamiento del lenguaje natural. A través del uso de estas tecnologías, las computadoras pueden ser entrenadas para realizar tareas específicas procesando grandes cantidades de datos y reconociendo patrones en los datos.
Para responder a la segunda pregunta, respecto de la importancia de la IA, plantearé algunos de los principios que la guían, los que pueden discutirse en forma mucho más amplia:
- La IA automatiza el aprendizaje y descubrimiento repetitivos a través de datos.
- La IA analiza más datos y datos más profundos utilizando redes neurales que tienen muchas capas ocultas
- La IA agrega inteligencia a productos existentes
- La IA logra una precisión increíble a través de redes neurales profundas
- La IA se adapta a través de algoritmos de aprendizaje progresivos para permitir que los datos llevan a cabo la programación
- La IA saca el mayor provecho de los datos
La IA tiene aplicaciones en la mayor diversidad de actividades del quehacer humano, por lo que nos aporta comodidad, novedad, prescindencia, etc. Es importante analizar los impactos que la IA tiene y puede tener sobre la sociedad y sobre la vida humana en general, lo que dará para otra publicación.
Autor: Fernando Pérez M.
Licenciado en Biología
Diplomado en Marketing General y Digital